En ocasiones se reciben
mensajes anónimos que pueden resultar
intimidantes. Cuando no se sabe quien envía esos mensajes con información o datos sobre
el remitente el miedo llega a sus vidas.
Lo que se debe hacer es acudir rápidamente a la policía para que puedan averiguar quien envía los mensajes. Hoy recibiremos mensajes intimidantes en
nuestro nuevo barrio.