No todos los vampiros son crueles, sedientos de sangres. Hay algunos que
se alimentan de humanos lo justo para sobrevivir
hasta incluso hay otros que beben sangre animal para no hacer daño a las personas. Por desgracia
son poquitos los que tienen esas costumbres por lo que hay que tener cuidado. Hoy seremos vampiros buenos.
La serie “Reginald: El vampiro” de la cadena SyFy
muestra a un joven vampiro aceptando sus poderes evitando no hacer daño a la gente al no tener asimilado quien es
ahora. Los personajes, Reginald Andres (Jacob Batalon) es un torpe vampiro que trabaja en un heladería y no
encaja entre los suyos ya que está adaptándose a sus poderes para aceptar su
nueva vida, Maurice Miller (Mandela Van
Peebles) es un ingenioso vampiro que antes formaba parte de los Panteras Negras para luchar por la
justicia siendo ahora mentor de los de su especie.
Sarah Keine (Em Haine)
es una ingenua heladera que no ve el mal en los demás por lo que tiene que
aprender a defenderse además de ser muy dulce con las personas que quiere, Nikki (Christin Park) es una letal vampiresa que sirve de asesina a sueldo
al disfrutar mutilando a sus víctimas y cuando se enamora hace locuras por amor
al ser excesivamente pasional, Todd
(Aren Buchholz) es el excéntrico
gerente de una heladería que se burla de sus empleados pensando que hace gracia
aunque luego realmente se da cuenta que se ha pasado con ellos.
Angela (Savannah Basley)
es una solitaria vampiresa que empieza a cuestionarse su deseo de poder para
ser más abierta con la gente y conectar con alguien con quien pasar la
eternidad, Claire (Thailey Roberge) es una curiosa
adolescente que le encanta lo sobrenatural pudiendo percibirlo al tener un
sexto sentido sin saber porque además de gustarle los granizados, Ashley (Marguerite Hanna) es una pasional heladera que le gusta investigar
leyendas urbanas buscando la manera de demostrar que son ciertas además de ser
una buena confidente.
La serie se podría decir que ha pasado con nota el examen de la crítica viendo sus reseñas notables. Lo que
más ha gustado ha sido su guion
divertido y original mezclando a
la perfección el terror con la comedia. También ha gustado
su trama que desde el principio capta la atención del espectador haciendo que los episodios sean fáciles de ver.
Mencionar que en la serie se muestran a los vampiros de una forma menos
sádica a lo que se está acostumbrado
ver. SyFy decidió cancelar la
serie tras su segunda temporada.
Como despedida os dejo esta pregunta
¿Seriáis un/a vampiro/vampiresa bueno/a o malo/a?
Raúl.
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