lunes, 20 de abril de 2015

En el Fondo Tiene Buen Corazón



Fingir ser alguien que no eres es mucho más complicado de lo que pensamos, no solo hay que mantener una identidad sino inventarse una vida. Esa vida hay que hacer que sea creíble para que la gente que nos rodea no sospeche que detrás existe otra persona diferente a quien dice ser. Hoy ayudaremos a un ex convicto a ocultar a los demás quien es realmente.


La serie “Banshee” de la cadena Cinemax nos cuenta como un ex convicto se hacer pasar por el sheriff de un apacible pueblo y la doble vida que lleva en dicho pueblo. Los personajes son muy violentos, Lucas Hood (Antony Starr) es un ex convicto que tras cumplir una larga condena se aprovecha la ocasión de hacerse pasar por el nuevo sheriff de un pequeño pueblo para escapar de los mafiosos que le persiguen, Anastasia/Carrie (Ivana Milicevic) era la novia de Lucas antes de entrar en la cárcel y que casualmente rehízo su vida en el pueblo donde su ex pareja se hace pasar por sheriff.


Kai Proctor (Ulrich Thomsen) es el mafioso del pueblo y se hace pasar por un respetado empresario para ocultar sus verdaderos negocios, Sugar (Frankie Faison) es un boxeador retirado que ahora regenta un bar y también el casero de Lucas, Job (Hoon Lee) es un hacker travestido que ayuda a Lucas en lo que se refiere a trabajos informáticos debido a sus conocimientos, Gordon (Rus Blackwell) es el Fiscal del pueblo y el marido de Carrie que desconoce el pasado de su esposa, Brock (Matt Servitto) es un oficial de la oficina del sheriff que choca continuamente con Lucas por los métodos que emplea.


Emmett (Demetrius Grosse) es un oficial afroamericano de la oficina del sheriff del pueblo y que no cuestiona nunca las decisiones de Lucas, Siobhan (Trieste Kelly Dunn) es la única agente femenina en la oficina del sheriff y una gran admiradora de los métodos de Lucas como agente de la ley, Rebecca (Lili Simmons) es una joven amish que no respeta las leyes de su comunidad además de ser la sobrina promiscua y fiestera de Proctor, Clay (Matthew Rauch) es el remilgado y fiel guardaespaldas de Proctor y también el brazo ejecutor a la hora de resolver los problemas que se le presentan a su jefe. 


La serie es espectacular, violenta y sexual. Todos sus personajes no dudan en saltarse la ley para cumplir con sus objetivos sean buenos o malos. Siendo del creador de “True Blood” no podía faltar tiroteos, muertes, peleas, sexo y sobre todo sangre mucha sangre. Y cuando veáis los créditos al término de los episodios no os despeguéis de la pantalla porque siempre se guardan lo mejor para el final. Os aconsejo que no os encariñéis con ningún personaje ya que ninguno está a salvo. Una serie que para muchos es ya de culto, sin lugar a dudas hay que felicitar a Cinemax por haber logrado crear una gran serie.

Esta pregunta es mi despedida ¿Habéis descubierto a alguien que fingía ser otra persona

Raúl.

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