Muchos piensan que la vida
entre rejas no es tan dura como en tiempos pasados. Ahora las cárceles tienen gimnasios, talleres, aulas e incluso piscina. También es cierto
que esto pasa en países desarrollados porque en otros
las instalaciones penitenciarias distan mucho de desear
llegando incluso a ser caóticas. Hoy
grabaremos un documental dentro de una cárcel.
La serie “Entre reja y reja” de la cadena Netflix nos muestra a un equipo
de periodistas grabando un documental
en una cárcel para ver el día a día de reclusos y funcionarios. Los personajes, Laura (Catherine Tate) es la innovadora
gobernadora de una cárcel que antes trabajó planificando eventos y utiliza los
mismos métodos a la hora de intentar rehabilitar a los presos, Ros (Catherine Tate) es una pasional reclusa que ama a su madre y está
deseando salir para reencontrarse con ella además de escribirle cartas a un
novio imaginario para hacerse la importante.
Ante (Catherine Tate) es
una tímida reclusa que intenta sobrevivir como puede en la cárcel al ser
ninguneada por las demás presas al verla un objetivo fácil para burlarse de
ella, Big Viv (Catherine Tate) es una agresiva reclusa que todos temen debido a su
temperamento y solo se puede calmar cantando además de querer parecerse a su ídolo
una famosa celebritie, Marco (Catherine Tate) es un arrogante funcionario
de prisiones que no se toma en serio su trabajo preocupándose solo de su físico
al ser muy presumido y aceptó el curro para ligar.
Anne Marie (Catherine Tate)
es una farsante ex reclusa que pese a salir de la cárcel sigue haciendo de las
suyas y visita a su hija presa para aprovecharse de ella pidiéndole dinero, Dean (Chrisstian Brassington) es un sarcástico funcionario de prisiones
que no soporta a su jefa al pensar que no es apta para el cargo que merecía él boicoteándola
cada vez que puede, Charlee (Jola Olajide) es una cínica reclusa que
se ha quedado embarazada en los vis a vis de su novio y siempre se arrima al
sol que más calienta para sacar beneficio para ella y su bebé.
La serie ha decepcionado a la crítica
por lo que ha recibido reseñas negativas.
Lo que menos ha gustado ha sido que una misma
actriz interprete la gran mayoría
de personajes principales impidiendo que brillen al no centrarse
en uno. Tampoco ha gustado nada su guion tradicional y predecible que lleva a la serie a encasillarse en las típicas sitcom
documentales de siempre. Mencionar que su trama vaga y aburrida no puede llamar la atención del espectador ni un segundo. Netflix ante tal desastre ha cancelado la serie tras su primera
temporada.
Como despedida os dejo esta pregunta
¿Creéis que la vida en la cárcel debería ser dura?
Raúl.
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