La profesión de payaso siempre ha recibido burlas injustamente por parte de la sociedad. Es un trabajo más que digno porque no hay nada más bonito que hacer reír a la gente y si es a los niños aun mejor. Además de ser una profesión en peligro de extinción al quedar cada vez menos payasos debido a lo poca remuneración económica que percibe por su trabajo. Hoy seremos payasos en un rodeo.